La Universidad de Georgetown, la universidad católica y jesuita más antigua de los Estados Unidos, ha nombrado a Eduardo Peñalver como su próximo presidente. En escritos anteriores, Peñalver ha declarado públicamente que rechaza las enseñanzas de la Iglesia Católica sobre la homosexualidad.
En un ensayo de 2014 para Commonweal, Peñalver escribió: “Rechazo las enseñanzas de la Iglesia sobre la homosexualidad, por lo que estaría a favor de una salida aún más fácil tratando las relaciones homosexuales comprometidas como moralmente valiosas”. Añadió que considera tales relaciones como expresiones de amor similares al matrimonio.
Peñalver, quien anteriormente se desempeñó como decano de la Facultad de Derecho de Cornell, también se ha pronunciado a favor de las causas LGBT y ha criticado las decisiones legales pro-vida. Se opuso a la política de la administración Trump que prohibía a las personas transgénero servir en el ejército, calificándola de “un paso atrás sin precedentes”. Asimismo, condenó la anulación de Roe v. Wade por parte de la Corte Suprema, alegando que perjudicaría a “las mujeres vulnerables y a las personas LGBTQ”.
Su nombramiento ha suscitado críticas por parte de educadores y organizaciones católicas que argumentan que Georgetown se ha alejado hace mucho de su identidad católica. The Cardinal Newman Society, que promueve la educación católica fiel, señaló que documentos de la Iglesia como Ex Corde Ecclesiae requieren que el presidente de una universidad católica defienda las enseñanzas de la Iglesia y fomente una sólida misión católica.
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