En respuesta a la propuesta de enmienda de la ley que legalizaría el aborto en caso de amenaza para la vida de la madre, hasta 20.000 personas (el 4% de la población de Malta) salieron a la calle en apoyo de las leyes provida del país. Además, 24.000 personas firmaron una petición pidiendo al gobierno maltés que rechazara la enmienda propuesta y adoptara en su lugar una alternativa, redactada por 80 líderes y académicos de la medicina, el derecho y la ética.
Según Lifesitenews, las leyes vigentes en Malta protegen el derecho a la vida de los niños antes de nacer, al tiempo que garantizan que las madres reciban la atención médica que necesitan, lo que se traduce en cero muertes maternas en los últimos 10 años. En Malta, los médicos están protegidos por la ley en casos extraordinarios en los que actúan para salvar la vida de una madre, pero sus acciones provocan la muerte de un niño antes de nacer.
De aprobarse, el proyecto de ley permitiría el aborto por razones que no pongan en peligro la vida, y abriría la puerta al aborto a petición, como explica el Dr. Callum Miller.
La Dra. Miriam Sciberras, presidenta de la Fundación Red por la Vida, ha declarado que “si el proyecto de ley se convierte en ley, Malta pasará de ser el único país de Europa con plena protección del feto a legalizar el aborto. Pedimos al gobierno que modifique urgentemente la redacción del proyecto de ley para adoptar los cambios recomendados en el documento de expertos elaborado por destacados médicos, abogados, especialistas en ética y académicos.”
Además de la Life Network Foundation, el proyecto de ley también fue condenado por 81 académicos, 450 médicos, 44 instituciones, la Asociación Médica de Malta y la Asociación Maltesa de Psiquiatría, informa Lifesitenews.
A modo de recordatorio, el Presidente maltés George Vella, antiguo médico, ha repetido varias veces que nunca firmaría un proyecto de ley que autorizara el asesinato de niños. Cuando se le preguntó si creía que había casos en los que el aborto debería ser permisible, respondió: “O has matado o no has matado, no puede haber una muerte a medias. Soy muy claro, no hay peros que valgan”.
Intensifiquemos nuestras oraciones por el único país de Europa que protege plenamente a los nonatos, con la esperanza de que Malta siga siendo un baluarte contra el maremoto de la cultura de la muerte que pretende destruir el vínculo más sagrado que existe: el que existe entre la madre y su hijo.