Last updated on octubre 19th, 2021 at 05:05 am
Veinte ONGs financiadas por las grandes multinacionales del abortismo mundial como Planned Parenthood o la Fundación Ford están tratando de abortar la reforma constitucional hondureña que protege la vida desde el momento de la concepción.
Recientemente presentaron una demanda ante la Corte Suprema hondureña en la que reclamaban que se anulara la reforma de la Constitución aprobada el pasado mes de enero por el Congreso de la nación siguiendo todos los requisitos formales y mayorías reforzadas necesarias.
Argumentan que la reforma constitucional “viola los derechos de las mujeres”. ¿Acaso las mujeres tienen “derecho” a acabar con la vida inocente que llevan dentro? Conviene recordar que no existe en el derecho internacional el derecho al aborto.
Honduras se convirtió en el primer estado en proteger constitucionalmente la vida desde el momento de la concepción. Un paso de gigante para un pequeño país. No obstante, Honduras no hizo sino llevar a su Constitución lo que ya señala la Convención Americana de Derechos Humanos en su artículo 4: “los estados protegerán la vida desde el momento de la concepción”.
La reforma constitucional hondureña fue una gran victoria de la ola celeste latinoamericana poco después de que Argentina diera luz verde al aborto contradiciendo su Constitución y la Convención Americana.
Además, la reforma hondureña era más simbólica que real porque su Código Penal ya impide el aborto. Pero elevarlo a rango constitucional blinda el derecho a la vida de los no nacidos y envía un mensaje pedagógico a toda la región muy potente.
Por eso las abortistas tratan de boicotear esta reforma. Y lo hacen con la estrategia que mejor resultado les ha dado hasta ahora: el litigio estratégico en la esperanza de que los jueces en lugar de interpretar la ley la reinterpreten según sus criterios ideológicos. En definitiva, con la esperanza puesta en el activismo judicial.
Es la estrategia que han seguido en la Corte Interamericana de Derechos Humanos con el ‘caso Manuela’ y la que está siguiendo ‘Causa Justa’ con la Corte colombiana. En ambos casos, como siempre, con financiación de Planned Parenthood y Fundación Ford. ¿Esto no es injerencia ideológica?
Por eso CitizenGO ha lanzado una campaña dirigida a los jueces de la Sala Constitucional de la Corte Suprema de Honduras, pidiéndoles que respeten la decisión del Congreso de la nación de reformar la Constitución para cumplir más adecuadamente con la Convención Americana de Derechos Humanos. Ya son más de mil los ciudadanos que se han sumado a esta campaña. Si quiere sumarse a esta campaña, puede hacerlo aquí.