Se ha elegido junio como mes del orgullo gay, pero cada vez hay más resistencia a la ideología de género y al pensamiento woke. ¿Por qué? Porque ahora está claro para mucha gente en todas partes que se trata de una doctrina política que la izquierda y los liberales quieren imponer para demoler la cultura cristiana de los países occidentales, las identidades nacionales y, en particular, la noción de familia, matrimonio y sexo biológico masculino y femenino.
Además, porque lo que empezó como una serie de manifestaciones para promover la “tolerancia con los homosexuales” se ha radicalizado en otra cosa: un movimiento que abusa de la tolerancia para mostrarse absolutamente tiránico, discriminatorio e intolerante con todos aquellos que no se someten ni reconocen los “privilegios LGBTI” y no aceptan su abuso en la sexualización de los niños en las escuelas y la promoción del transexualismo.
Por supuesto, los padres son los primeros en reaccionar y algunos ejemplos pueden ayudarnos y reforzarnos en la creencia de la “buena batalla” que todos tenemos que librar.
Primero: el documental de Matt Wash “¿Qué es una mujer?”, que desmonta los falsos argumentos de la ideología de género en el momento de escribir estas líneas, ha recibido más de 170 millones de visitas. El comentario de Elon Musk, propietario de Twitter, de que “todos los padres deberían ver este documental” ha tenido más de 85 millones de visitas. Debemos difundir esta película y este comentario para que prevalezca el sentido común y se recupere el valor.
Segundo: una reciente encuesta realizada en Estados Unidos por Rasmussen Reports, “más de siete de cada diez encuestados (71%) opinan que sólo hay dos sexos: masculino y femenino. Sólo el 23% está en contra, mientras que el 6% prefirió no hacer comentarios”.
Por ideología, una gran mayoría de republicanos (83%) apoya esta afirmación. Casi siete de cada diez demócratas (67%) también la apoyan, con un 47% “muy de acuerdo” y un 53% “algo de acuerdo”.
Otra pregunta formulada por Rasmussen Reports fue si las escuelas y los profesores deberían enseñar a los alumnos sobre identidad sexual: seis de cada 10 estadounidenses (60%) están en contra. El voto negativo fue apoyado por el 75% de los republicanos y el 44% de los demócratas. El 26% se mostró a favor y el 14% prefirió no contestar.
Más de la mitad de los encuestados (59%), entre ellos el 70% de los republicanos y el 54% de los demócratas, rechazan los tratamientos hormonales de cambio de sexo para menores. Estas cifras nos demuestran que no estamos solos en la batalla, si adoptamos una postura contra las peligrosas locuras de la tiránica doctrina del “género”, muchos otros nos apoyarán y podremos poner fin a la devastadora tragedia actual.
Tercero: Según la cuenta de Twitter @EndWokeness (fin del pensamiento woke), el boicot contra las empresas que promocionan sus productos mediante propaganda de ideología de género está funcionando. Las empresas más afectadas son la cervecera Budweiser, la tienda Target, Disney, el equipo de béisbol de los Dodgers y la empresa de ropa North Face.
El boicot se lleva a cabo bajo el lema “get woke, go broke”. El escritor Mike González, autor del libro ‘Black Lives Matter: The Making of a Neo-Marxist Revolution, tiene razón cuando dice: Si pensabas que podías ignorar este ataque a tu forma de vida, te estabas engañando a ti mismo. Si pensabas que las “guerras culturales” eran para otros, piénsalo otra vez. La elección es binaria: o te rindes o luchas contra este mal con todas tus fuerzas.
Cuarto: La locura del despertar. De hecho, si no se combate el pensamiento “woke”, seguirá radicalizándose hasta la locura, como demuestra el caso de Logan Brown, una mujer biológica que se cortó los pechos, tomó hormonas masculinas y se declaró hombre. Y cuando se quedó embarazada, concedió delirantes entrevistas a revistas de glamour y periódicos de todo el mundo diciendo que ella, o “él”, era la prueba de que los hombres podían quedarse embarazados.
Has leído bien, una mujer que se hace llamar hombre se queda embarazada y ondea a los cuatro vientos que los hombres pueden quedarse embarazados. ¿No es esto una prueba irrefutable de que estamos en la locura total y de que la propia “doctrina woke” y LGBTI no es más que la mayor y más dramática enfermedad mental que ha infectado al mundo entero?
Pues bien, no podemos ni debemos olvidar que la única “oposición” real al poder opresor que nos rodea y pretende sacrificar incluso a la generación de nuestros hijos, es la “vida en la verdad”, es ese “poder de los sin poder” que Vaclav Havel vivió con sus amigos y destruyó la mentira del totalitarismo opresor y mentiroso del comunismo soviético.
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