Un nuevo estudio exhaustivo suscita preocupación por el riesgo de suicidio entre las personas que se han sometido a una cirugía de reasignación de sexo.
El estudio, en el que participaron 56 organizaciones sanitarias estadounidenses y más de 90 millones de pacientes, analizó datos recogidos entre febrero de 2003 y febrero de 2023. Descubrió que las personas que se habían sometido a una cirugía de reafirmación de género tenían un riesgo de intento de suicidio más de 12 veces mayor que las que no lo habían hecho.
La investigación, realizada a partir de historiales médicos en lugar de datos auto informados, examinó millones de casos durante un periodo de 20 años, controlando sistemáticamente otros factores y comparando las experiencias de los pacientes que se habían sometido a cirugía de transición con los que no.
De los pacientes que hicieron la transición, el 3,47% fueron tratados por intentos de suicidio, frente al 0,29% de los pacientes que no hicieron la transición.
Los investigadores concluyeron que la cirugía de reafirmación de género se asocia significativamente con un elevado riesgo de suicidio, lo que subraya la necesidad de un apoyo psiquiátrico integral tras el procedimiento.
El estudio no incluyó a menores y se ha subido a la base de datos de estudios revisados por expertos del Instituto Nacional de Salud (NIH), PubMed.
Personalidades destacadas, como Jordan Peterson, expresaron su preocupación por las conclusiones del estudio, criticaron a los médicos que avalan la cirugía para la disforia de género e instaron a los presidentes Biden y Trudeau a tomar nota del estudio.
A medida que las cirugías de reafirmación de género siguen aumentando, esta investigación sugiere la necesidad de un mayor reconocimiento y comprensión de las posibles implicaciones para la salud mental.
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