En los últimos días, una amplia mayoría de diputados de la Cámara de Diputados neerlandesa ha votado a favor de una nueva ley que impedirá a los propietarios y criadores de animales de compañía sacrificar a sus mascotas si envejecen o enferman.
Si, por el contrario, se trata de seres humanos ancianos o enfermos, la legislación y la práctica neerlandesas enseñan que la eutanasia puede permitir a cualquiera matar sin peligro de ser castigado. ¡¡Estamos en la locura total!!
La nueva ley de protección de animales viejos y enfermos también introduce la prohibición de por vida de tener animales de compañía para las personas y criadores que sean condenados por maltrato animal grave, y aumenta la pena máxima de prisión de tres a cinco años.
La nueva ley fue redactada por el partido animalista PvdD, según el cual los dueños de animales de compañía a veces matan ellos mismos a sus mascotas viejas y enfermas porque les preocupa pagar a un veterinario.
Los ganaderos también serían culpables de matar animales porque no son del sexo o color adecuados, dijo el diputado del PvdD Frank Wassenberg. «Esta vez es demasiado», dijo.
El Ministro de Agricultura, Piet Adema, tendrá que determinar ahora exactamente a qué animales se aplicará la nueva legislación. Es probable que la prohibición no entre en vigor hasta 2024, después de que el Senado la apruebe en las próximas semanas.
Si los Países Bajos fueran un país normal, consideraríamos la nueva ley quizá excesiva pero, en el fondo, bastante aceptable. Sin embargo, en el mismo país donde se protege a los animales viejos y enfermos, se promueve la eutanasia (es decir, el asesinato) de seres humanos viejos, deprimidos y enfermos de todas las edades, ¡incluso niños!
De hecho, no podemos olvidar que en el pasado mes de abril, el Consejo de Ministros avanzó la aprobación de una nueva norma para permitir la eutanasia a niños de entre 1 y 12 años con enfermedades terminales que sufran de forma insoportable y sin remedio.
El Ministro de Sanidad, Ernst Kuipers, anunció el viernes en un comunicado de prensa que espera que la normativa se aplique en el plazo de un año. Todo ello, después de autorizar incluso la eutanasia para los ancianos, mayores de 75 años, aunque estén absolutamente sanos y no enfermos en 2020. ¿Normal? No, muy grave, cuando anteponemos las protecciones de los animales a las de los humanos acabamos justo en la «granja de animales», desde luego no nos acercamos al progreso humano.
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