La familia está amenazada en todas partes. En Alemania, cada poco se produce una decisión política contra la familia y la autonomía de los padres en la educación de sus hijos. iFamNews habla con el iniciador de la “Iniciativa Familienschutz” y“Christenschutz”, Sven von Storch*, que comenta con delicadeza y perspicacia los acontecimientos políticos actuales en Alemania. Le preocupa especialmente el “Gran Reseteo”, cuyo fin es destruir los valores europeos (incluida la Familia).
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iFamNews: La familia está siendo atacada en todas partes, especialmente en Alemania. ¿Cuál considera que es la mayor amenaza para la Familia en este momento?
Sven von Storch: La familia, formada por el padre, la madre y los hijos, es la base de las naciones y el fundamento vivo de las civilizaciones. La decadencia y el desmantelamiento sistemático de esta imagen familiar y de las virtudes cristianas occidentales que la acompañan han ido calado muy hondo en la política. Por tanto, no cabe esperar un cambio de tendencia a corto plazo. Al menos no con los miembros actuales de los viejos partidos en Alemania.
Pero también hay rayos de esperanza cuando miramos a nuestros vecinos del este y del sur. Las fuerzas conservadoras de Viktor Orbán y Mateusz Morawiecki han abierto la puerta a una política de afirmación de la Vida, favorable a los niños y a los padres, basada en el concepto cristiano del hombre. No se sabe cuándo esta luz de esperanza llegará también a Alemania, pero afirmo como Abraham Lincoln: “puedes engañar a todo el mundo algún tiempo. Puedes engañar a algunos todo el tiempo. Pero no puedes engañar a todo el mundo todo el tiempo”. La Familia en la unidad del amor, la responsabilidad y la fidelidad, por tanto volverá a ser el centro de la sociedad y la política.
iFamNews: En la actualidad, Angela Merkel no deja de endurecer las medidas anti-Covid en Alemania, aunque su estrategia aún no ha dado frutos que justifiquen estas medidas. ¿Cuáles serán las consecuencias a largo plazo de estas medidas para la sociedad?
Sven von Storch: La política anti-Covid del gobierno de Merkel con sus cierres totalitarios está destruyendo la economía y la sociedad de nuestro país. Detrás de esto está la motivación de las élites políticas y financieras globalistas y de los ideólogos de izquierda para llevar a cabo un cambio de sistema. El Coronavirus se utiliza como pretexto para destruir el viejo orden conocido y sustituirlo por uno nuevo.
Así, la aprobación popular de la política de bloqueo de Merkel cae del 73% al 35% – Cada vez más gente se desespera por sus medidas y restricciones. Muchos ciudadanos temen por su situación económica. De hecho, el 43% pide que se relaje el cierre.
El Coronavirus ha ofrecido repentinamente a las élites globalistas una oportunidad histórica para promover una gigantesca agitación política, social y económica. El Covid podrá ser utilizado como excusa para todo tipo de medidas para finalmente implementar políticamente lo que desde hace tiempo persiguen los ideólogos neomarxistas y las élites globalistas.
iFamNews: En este sentido, Klaus Schwab ha propuesto aprovechar la crisis económica que están desencadenando los gobiernos para llevar a cabo un “Gran Reseteo”.
Sven von Storch: El Coronavirus se utiliza como caballo de Troya para destruir los valores de Europa. Lo esencial es que las élites globales y el mundo financiero se enfrentan a la mayor burbuja financiera de la historia y urge una causa o excusa para cambiar el mundo, de modo que al final las élites financieras puedan seguir con su juego de casino en los mercados de acciones y bonos y no tengan que rendir cuentas del fracaso.
Ya veremos: Siempre se encontrarán nuevas excusas para mantener y prolongar el cierre y otras medidas. Pues la crisis debe continuar para las élites hasta que, en el fondo, el mundo cambie tanto que puedan continuar su juego y estabilizar su poder. Y los ciudadanos lo pagaremos con la pérdida de nivel de vida y de libertad. En cambio, los funcionarios globalistas nos impondrán un nuevo conjunto de valores, en el que nuestros valores básicos quedan suspendidos y nos convertimos en prisioneros del sistema, como ya podemos observar de forma ejemplar en China.
En el llamado “Nuevo orden” que se implantará con el “Great Reset”, nuestros fundamentos occidentales de identidad y valores ya no tendrán cabida. La cultura de la destrucción es el soporte ideológico, la máxima de acción de Merkel y Schwab. Esto se ha visto en el pasado reciente con las cuestiones de familia, género, nación, religión, etc. Encerrar a la gente mediante el encierro de Merkel es necesario para implementar el trabajo de destrucción. Porque sólo cuando se destruye lo viejo se puede implantar lo nuevo.
Quien no quiera despertarse irremediablemente en un mundo así en un futuro previsible -no sólo un día- y no quiera ser esclavo de esta “nueva normalidad”, de este nuevo orden social totalitario neomarxista, debe mirar hoy mismo a esta realidad a los ojos. Todavía estamos a tiempo de detenerlos. Tenemos que levantarnos ahora y luchar por nuestra libertad en nuestro entorno y en todos los lugares donde podamos trabajar.
iFamNews: Los altos cargos de la Iglesia guardan silencio o son muy blandos con sus críticas. Muchos -especialmente los creyentes- quieren palabras más claras. ¿Cuál es su opinión al respecto?
Sven von Storch: Desde las restricciones a cuenta del Coronavirus sólo ha habido protestas (en Alemania) de algunos obispos. Por el contrario: el curso de bloqueo que mientras tanto se tambalea del Gobierno Federal es acompañado afirmativamente por la Conferencia Episcopal Protestante así como por la Católica y confirmado una y otra vez. Las primeras grandes procesiones de Semana Santa ya están canceladas. “Este año, la Semana Santa y la Pascua volverán a ser probablemente diferentes de lo habitual debido a la pandemia del Covid”, escribió la Conferencia Episcopal Alemana de forma beligerante en su página web. La vida cristiana en Alemania se está desmantelando pieza a pieza. Con él mueren las costumbres y tradiciones cristianas, la reunión de los fieles, la oración común, la experiencia espiritual. Uno busca en vano una tormenta de indignación pública.
Pero el hombre necesita un hogar espiritual. Y la parte más importante de este hogar espiritual e identidad para casi todos los alemanes y europeos es el cristianismo, lo quiera o no. Los cimientos de nuestra libertad en Occidente los puso el cristianismo, sin él esa libertad dejaría de existir. Esto se aplica también a los no cristianos. Por lo tanto, los cristianos justos tienen que luchar por su libertad religiosa y dejar claro a los políticos que ellos también no se dejan “quitar” sus fiestas litúrgicas.
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*Sven von Storch nació y creció en Osorno, Chile. Se formó y estudió administración de empresas en Santiago de Chile, Greifswald y Göttingen. Tras sus estudios, fue consultor de comunicación estratégica en Chile y Alemania durante muchos años. Está casado con Beatrix von Storch, diputada del Bundestag. Von Storch vive en Berlín, donde dirige el movimiento cívico Zivile Allianz , desde el que operan varias iniciativas de la sociedad civil. Es el editor del periódico de Internet y del blog FreeWorld.net y director del Instituto de Estudios Estratégicos de Berlín.