El tribunal del distrito de Recklinghausen en Alemania ha prohibido al vecino de una mujer transexual seguir dirigiéndose a ella con el nombre de naciomiento Rüdiger, so pena de una multa de 250.000 euros, informa RP Online.
Sophie Vivien Kutzner, a la que sus padres dieron el nombre de Rüdiger tras su nacimiento porque los médicos pensaban que era un varón debido a su fenotipo (conjunto de caracteres visibles que un individuo presenta como resultado de la interacción entre su genotipo y el medio), lleva algo más de seis años viviendo como mujer trans. Un antiguo vecino, que durante años sólo la conocía como Rüdiger, siguió dirigiéndose a ella por su nombre de nacimiento incluso después de que cambiara su identidad de género.
En un principio se habría solicitado al antiguo vecino que asistiera a dos reuniones de mediación, a las que no se presentó. Kutzner demandó entonces al antiguo vecino, y el tribunal de distrito ha dictaminado ahora que el hombre debe abstenerse de seguir llamando Rüdiger a Sophie Vivien Kutzner. Y en caso de incumplimiento, se expone a una multa de 250.000 euros o, en su defecto, a una pena de prisión.
El ex vecino tampoco se presentó a la vista judicial.