¿Dónde está la intervención del arzobispo?

Estamos desconcertados y sinceramente sorprendidos por el silencio del arzobispo de Turín y que no haya intervenido para bloquear esta iniciciativa

Santa Maria Maggiore en el municipio de Poirino, la imagen modificada en Canva

Transmitimos íntegramente la reseña de Toni Brandi, presidente de Pro Vita & Famiglia Onlus sobre la iniciativa de la parroquia de Santa Maria Maggiore del municipio de Poirino, en la provincia de Turín, sobre el tema “El amor en sus formas y expresiones: sexualidad, emociones, sentimientos. Lgbtq+, entre el conocimiento y el respeto”. :

“Estamos desconcertados y alarmados por la iniciativa promovida el por la parroquia de Santa Maria Maggiore del municipio de Poirino, en la provincia de Turín, sobre el tema “El amor en sus formas y expresiones: sexualidad, emociones, sentimientos. Lgbtq+, entre conocimiento y respeto”con el ponente Don Domenico Cravero, “consultor en sexología”.

A pesar de la compartible intención de promover una cultura de respeto y convivencia civil, resulta desconcertante que una parroquia haya promovido un evento que puede remontarse a la galaxia Lgbtqia+ y, por tanto, a sus reivindicaciones ideológicas: el género, la sexualidad fluida, los alias profesionales y la transición de género de los menores en las escuelas, e incluso la práctica bárbara del alquiler de vientres.

Sin embargo, estamos aún más desconcertados y sinceramente sorprendidos por el silencio de Monseñor Roberto Repole, arzobispo de Turín, a quien nos dirigimos en dos cartas oficiales antes de que se produjera el propio acontecimiento. La única respuesta que recibimos fue que el arzobispo ha sido informado”, pero no obtuvimos más información ni el más mínimo compromiso con una intervención que, en cambio, parecía coherente y necesaria.

De hecho, la ideología de género, portada por el mundo Lgbtqia+, ha sido condenada reiteradamente por el Papa Francisco durante su pontificado. Una ideología que pretende el desmantelamiento sistemático de la familia natural fundada por un hombre y una mujer y el derecho de todo niño a tener una madre y un padre, así como la libertad educativa de estos últimos. Por tanto, no vemos ninguna razón plausible para que el arzobispo no haya intervenido en el bloqueo de esta iniciativa.

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