Los siguientes son extractos de una entrevista que la Ministra Eugenia Roccella concedió en un programa de la Rai 3:
«En Italia todos los niños tienen los mismos derechos y en las mismas parejas que recurren al alquiler de vientres en el extranjero se reconoce al padre biológico.
El problema es que estas parejas a veces no aceptan el reconocimiento del padre biológico y piden que se les inscriba en el registro civil a los dos.
El Tribunal Supremo ha dicho que la vía es la adopción en casos especiales. El segundo progenitor puede hacerlo».
Luego el ministro añade: «Es fácil. Aquí no hay que solicitar el derecho. Es un proceso que da más garantías al niño».
«Lo que dijo Rampelli es la verdad. Entonces entiendo que el término venta ambulante no es correcto porque evoca otras cosas». Así comentaba la Ministra de Igualdad de Oportunidades y Familia las palabras del Vicepresidente de la Cámara de Diputados, que ha dicho hoy que las parejas arco iris «venden ambulantemente» niños como niños.
«Si en el registro civil se dice que ambos padres son progenitores, se está diciendo algo que no es la verdad», dice Roccella, que reitera: «la ley dice que se necesita una madre y un padre para la adopción».
«Un padre homosexual puede ser muy buen padre, pero hay que ver qué modelo queremos: tenemos un modelo con papá y mamá. Es nuestra experiencia íntima, lo que todos hemos sentido», concluye la Ministra de la Familia, Eugenia Roccella.
«En Italia la maternidad subrogada está prohibida y hay que llamarla por su nombre: utero in affitto (vientre de alquiler)», reitera Roccella, quien explica que «porque pone en el punto de mira el paso del dinero, hay que leer los contratos de maternidad subrogada, se abre un mercado de niños por primera vez en la historia de la humanidad, hay ferias en el mundo, incluso lo han probado en Milán», dice el ministro.
«Se eligen los ovocitos», dice, «un mercado con connotaciones racistas, se eligen mujeres blancas, los ovocitos de mujeres negras cuestan menos. Luego se elige a la mujer que presta el útero, que suele ser guapa y rubia, y también se elige la religión».
El ministro añadió: «Ahora vamos a hacer una ley contra la maternidad subrogada, que está prohibida en Italia y su propaganda también».
Continúa sobre este tema: «En Europa hay incluso ferias. Hoy puede costar unos 100 mil euros y las mujeres, en los países donde es legal, se llevan entre 15 y 20 mil. Es una cuestión de si la maternidad puede ser una cuestión de mercado», concluye el ministro.
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