El nadador transexual estadounidense William Thomas, conocido por su infame victoria sobre Riley Gaines, ha perdido su oportunidad de participar en los próximos Juegos Olímpicos de París. Thomas libró una batalla legal contra World Aquatics (WA), el organismo rector internacional de los deportes acuáticos, argumentando que las normas que le impedían competir eran “inválidas e ilegales”.
Thomas, que compitió como varón en el equipo de natación de la Universidad de Pensilvania durante tres años antes de someterse a una terapia hormonal y hacer la transición, ha provocado un debate nacional sobre la equidad de las atletas trans que compiten en deportes femeninos.
La nadadora de 25 años apeló la política de 2022 de la Acuática Mundial, que prohíbe competir en categoría femenina a los atletas que hayan pasado por cualquier parte de la pubertad masculina. Sin embargo, el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), con sede en Suiza, falló en contra de Thomas, concluyendo que “simplemente no tenía derecho a comprometerse con la elegibilidad para competir en competiciones WA”.
World Aquatics saludó la decisión como un paso significativo para preservar el deporte femenino y reafirmó su compromiso de fomentar la equidad, el respeto y la igualdad de oportunidades para las atletas de ambos sexos.