Katja Thieme, profesora asociada de la Universidad de Columbia Británica, hizo unos polémicos comentarios en los que sugería que los padres deberían exponer a sus hijos a “penes” y “vulvas” de distintas edades con el fin de prepararlos para los encuentros con personas con confusión de género en los espacios públicos.
Thieme publicó sus comentarios en la plataforma de medios sociales X (antes conocida como Twitter), afirmando que dejar que los niños vean esas partes del cuerpo de forma casual y normalizada es una excelente idea de crianza. Añadió además que el mundo y los propios niños se lo agradecerían a los padres en el futuro.
Las declaraciones de Thieme respondían a un post de Riley Gaines, una nadadora universitaria estadounidense que se ha manifestado en contra de la inclusión de varones biológicos, como William “Lia Thomas”, en los deportes femeninos. Gaines había compartido la historia de una chica de 16 años que, al parecer, fue expulsada del YMCA y expulsada de su equipo de natación por oponerse a la presencia de un varón desnudo en los vestuarios femeninos.
Los comentarios del profesor han generado una gran controversia y críticas. Exponer a los niños pequeños a material explícito de esta manera es inapropiadamente destructivo. Hay que proteger a los niños de la degeneración de la incansable campaña de la izquierda para acabar con cualquier tipo de pureza e inocencia en la próxima generación.