La verdad es que las familias numerosas cada vez estamos más acorraladas. Nos ningunean en casi todas partes. Con una ley nacional que se supone que nos protege, no contamos en la vida pública.
No existe una política pública familiar. Solo se legislan políticas de asistencia y, claro, nos miden por la renta. Hay que ser pobres para que nos consideren.
Las familias numerosas evidencian su esencia en el número de hijos. No en la renta. Aunque se identifica hijos con menor nivel de renta por un mayor gasto, no quiere decir que seamos más pobres por tener más hijos. Los hijos son una riqueza y un regalo.
Lo que nos hace más vulnerables, que no pobres, es la desprotección jurídica, social, cultural, fiscal, … ya que no se corrigen las posibles situaciones de desventaja frente a otras realidades familiares y frente a otras familias con menos hijos o sin ellos. ¿Sirve de algo el artículo 9 punto 2 de nuestra Constitución que establece “el principio de igualdad material”?
Ahora, además de considerar que tener más hijos equivale a ser pobre, nos acusan de ser más contaminantes. De estropear el planeta por tener más hijos.
¿Qué contamina más, 4 familias con 1 hijo cada una o una familia con 4 hijos? La reducción de población es exigencia de la agenda 2030.
Nos dicen que tenemos que reducir la población, nos “ayudan” con medidas que no valoran la vida –como el aborto o la eutanasia-, ideologías que destruyen el concepto de familia –rupturas familiares-, eliminando la esencia y el nombre de familia numerosa –proyecto de Ley de familias-, …
¡Pero si Europa desaparece por la falta de nacimientos, no nacen niños! ¿Eso es lo que quieren?
¡Pues nos hemos plantado!
No queremos esta visión tan negativa imperante en la actualidad sobre tener hijos, que se desaconseje formas familias grandes, la imposición de tristeza y amargura por sentirse oprimidos por la familia, ser la causa de la sobre explotación y contaminación del planeta, …
Lo que impera y nos imponen es una profunda pérdida de valores y de una visión trascendental de la vida y de la familia. Ya que el salario, trabajo, vivienda, ayudas, … son excusas para no tener hijos. En épocas de grandes crisis, pestes y hambrunas es cuando se tenían más hijos.
Queremos lanzar un mensaje a contracorriente. Gritar a los cuatro vientos que son precisamente los hijos, los ciudadanos del futuro, los que salvarán el planeta, los que podrán hacer mejor a la sociedad, los que garantizan que habrá un futuro para todos, son los que ayudan a colorear y alegrar este mundo triste, gris y envejecido.
“SALVA EL PLANETA, TEN MÁS HIJOS”
Este es nuestro lema, el slogan de la campaña. Con carteles en el Metro y en las marquesinas de las paradas de autobuses en Madrid y un código QR que enlaza con un vídeo que refleja la realidad del acoso a tener más hijos y evidencia que precisamente los hijos son los que salvan el planeta, que lo llenan de personas, de vida, de alegría y de color.