Las primeras estimaciones hablan de entre 10.000 y 20.000 participantes en la “Procesión de la Cruz por la Familia Serbia” y la prohibición del “Europride”, que se anunció para septiembre de 2022. Según informes del lugar, entre 25.000 y 30.000 personas salieron a las calles de Belgrado.
Aunque el “Camino de la Cruz” no fue anunciado en ningún medio importante, sino solo en los portales patrióticos y a través de las redes sociales, la respuesta de la gente es excepcional e indica claramente cuántas personas habrían salido a las calles si al menos un canal de televisión con una frecuencia nacional hubiera transmitido el anuncio de la marcha de protesta.
Además, por las reacciones de los medios, podemos ver que a muchas personas les gustaría que algo así no hubiera sucedido, y en consecuencia se están volviendo sordos y ciegos. Con la excepción de los portales patrióticos, solo unos pocos medios impresos informaron sobre el paso de peatones en la edición en línea, donde se esperaba que N1 redujera el número de asistentes (“alrededor de 5,000”) y grabó un total de 9 segundos de material de video mucho antes del inicio de la caminata, en los momentos en que la gente aún se reunía.
Les recordamos que el primer “orgullo” en Belgrado se celebró en 2010, luego en el 2014 y desde entonces se ha celebrado todos los años. Sin embargo, el pueblo de Serbia salió a las calles este año para protestar porque piensan que la capital debería albergar el llamado “Europride” a partir del día 12 hasta el 18 de septiembre, y por tanto ser un lugar de reunión de homosexuales y transexuales para toda Europa, justo en un momento en el que se ha demostrado científicamente que esta población en la mayoría de los casos transmite la viruela del mono, una nueva amenaza para la salud que se cierne sobre el mundo entero. Además, en ese período están previstas visitas a escuelas y jardines de infancia, donde se distribuirán materiales promocionales sobre el estilo de vida LGBT a los niños, así como visitas a iglesias y monasterios ortodoxos.
El pueblo de Serbia no impide que nadie viva su vida de acuerdo con su voluntad y deseo, pero no permitirá que los niños sean dirigidos a estilos de vida que contradigan las creencias religiosas y morales sus padres. La sexualidad es un asunto personal de cada individuo, y la promoción de estilos de vida asociados con un mayor riesgo de depresión, pensamientos suicidas y suicidios, abuso de drogas, enfermedades de transmisión sexual y ahora la viruela del mono, no es deseable ni en el aula escolar ni en las calles de cualquier ciudad de Serbia.