Un grupo de expertos internacionales ha advertido contra la “exageración de los beneficios y la minimización de los riesgos” de los cuidados de reafirmación de género, incluidos los fármacos y las cirugías de intercambio de sexo, en el tratamiento de los jóvenes con confusión de género en Estados Unidos.
En una carta al Wall Street Journal, el grupo de 21 médicos e investigadores de nueve países argumentó que la atención que se presta a estas personas está impulsada por la ideología política y no por la evidencia.
Los expertos desacreditaron la afirmación de la Sociedad Endocrina estadounidense de que la investigación científica apoya la noción de que las intervenciones médicas mejoran el bienestar de las personas con confusión de género.
La carta hacía hincapié en que la afirmación no está respaldada por las mejores pruebas disponibles, ya que las revisiones encuentran sistemáticamente una certeza baja o muy baja en los beneficios para la salud mental de las intervenciones hormonales en menores.
Por otro lado, los riesgos asociados a estas intervenciones, como la esterilidad, la dependencia de por vida de la medicación y la posibilidad de arrepentimiento, son significativos.
El grupo de profesionales expresó su sorpresa por la postura de la Sociedad de Endocrinología y destacó que los países europeos y las organizaciones profesionales internacionales dan prioridad a las terapias de conversación frente a las hormonas y las cirugías en la atención a las personas con confusión de género.
Calificaron de desafortunada la asistencia sanitaria impulsada por la ideología política en Estados Unidos y pidieron a las sociedades médicas que ajustaran sus recomendaciones a las mejores pruebas disponibles.
En Inglaterra, el NHS England anunció en junio que no encargará de forma rutinaria fármacos bloqueadores de la pubertad para niños y jóvenes con confusión de género. La decisión se tomó tras una revisión de la práctica clínica en el Servicio de Desarrollo de la Identidad de Género del Tavistock and Portman NHS Foundation Trust.
Según las especificaciones provisionales, la intervención principal para las personas con confusión de género en el nuevo servicio será el apoyo psicológico.
La postura cautelosa de estos expertos internacionales pone de relieve la necesidad de un enfoque integral y basado en pruebas para la atención de los jóvenes con confusión de género, que dé prioridad a su bienestar y tenga en cuenta los riesgos potenciales y los resultados a largo plazo.