El fiscal general de Kansas, Kris Kobach, está tomando medidas contra los distritos escolares que aparentemente permiten a los estudiantes la transición de género sin el consentimiento de los padres. Kobach, que afirmó que los padres deberían participar en decisiones con importantes repercusiones médicas y psicológicas, identificó seis distritos que supuestamente introducían tales políticas y les escribió en diciembre.
Tras la intervención de Kobach, los distritos de Belle Plaine y Maize enmendaron rápidamente sus políticas, mientras que Kansas City, Shawnee Mission y Topeka se negaron a cambiar su postura. Sin embargo, el distrito escolar de Olathe parece estar revisando sus directrices. Las orientaciones existentes sugieren que, en general, el personal debe obtener el consentimiento de los padres antes de dirigirse públicamente a un alumno por su nombre/pronombre preferido. Aun así, indica que podría haber casos en los que los padres no estén informados.
Los expertos sostienen que las políticas de exclusión parental pueden dañar la relación padre-hijo, por lo que aplauden la rápida rectificación de Kansas.